El diseñador matancero Alexander Rodríguez Castellanos representó a Cuba en la Tercera Semana Internacional de la Moda de la Seda Tailandesa, que tuvo lugar a inicios del mes de diciembre en ese país del sudeste asiático.

Este evento, que pretendía homenajear el 90 cumpleaños de la reina madre, su Majestad Sirikit, tiende un puente cultural entre naciones, especialmente en los campos del arte y las confecciones textiles.

“Las Ruta de la Seda por el Mundo es un proyecto de la casa real de Tailandia para reverenciar y potenciar su ancestral cultura, desde la visión de creadores de los cinco continentes”, según nos cuenta Alexander.

La propuesta para participar llegó a través de la embajada cubana allí. El Ministerio de Cultura, el Consejo Nacional de las Artes Plásticas y la Asociación Cubana de Artesanos Artistas fueron los encargados de elegir a un candidato, honor que recayó en el yumurino.

“No me nominé para exhibir un show completo (una de las dos modalidades del evento, que consta de 12 diseños), porque el material llegó al país con retraso, fue muy difícil traerlo a causa de las limitaciones impuestas por el bloqueo.

“El proceso me mantuvo en vilo, pero afortunadamente culminó con éxito, gracias a las gestiones de nuestro embajador, el señor Héctor Conde, y a la costurera que me secundó en mi locura,  Mayelín González, quien laboró día y noche”.

Luego de atravesar no pocas dificultades, pudo llevar su pasarela de seis diseños al centro comercial Siam Paragon, de la ciudad de Bangkok.

“La selección de los colores partió de un catálogo que me enviaron. Había sedas bellísimas, con mucho trabajo gráfico, pero traté de concentrarme en los tonos neutros.

“Concebí la colección como un recorrido por los orígenes del textil. Evoqué, desde el color, la forma o las texturas, a la mariposa, sus huevos, los capullos (kokunes), la planta con la cual se alimenta la larva, y concluí con una reverencia a la flor nacional de Tailandia. 

“En la gala inaugural había que presentar en seda una interpretación del traje típico de cada país. En mi caso, hice una referencia visual a la bata cubana, porque era, a diferencia de la guayabera, la que más se avenía con la tela”. 

Algunos de estos vestidos fueron acompañados por hermosos accesorios elaborados, utilizando el kokún del gusano de seda.

“Esto fue posible por la contribución de la Estación Experimental Indio Hatuey, que tiene la sericultura entre sus líneas de desarrollo. En el 2019, un grupo de profesores australianos dio un curso allí, para aprender a entintar ese material con técnicas tradicionales y productos naturales”. 

La Semana de la Moda incluyó un segmento teórico, donde Alexander impartió dos conferencias, una sobre el proyecto Arte y Moda, que cumple 20 años en el 2023, y otra sobre la seda en Cuba, abordada desde la experiencia de la institución científica matancera.

“Los profesionales de Indio Hatuey me facilitaron la información y las imágenes para mostrar. Su trabajo generó asombro entre los participantes y un gran interés por futuras colaboraciones.

“Los organizadores desean que me presente nuevamente con un show completo, porque les resultó muy atractiva la fundamentación de mi colección, cómo abordé su cultura ancestral desde nuestros orígenes caribeños”.